jueves, 7 de enero de 2010

LA VOZ DEL SENSEI; original de Rafael Santamaría


 Sólo el que escucha la voz del silencio en la quietud del eterno infinito será capaz de contemplar la verdad de su esencia. No hay nada que el hombre no pueda hacer, salvo aquello que no quiere hacer.
A vosotros:

"-No escuches la voz de tu amo salvo cuando tu amo seas tu mismo, y haz aquello que sin pausa lleva al final del Camino, pero recuerda que no hay más Camino que tú, y que ese, tu camino, es el Sendero Unico que lleva al alma hacía el Espíritu del Eterno; se pues, digno de recorrer ese sendero día y noche, sabiendo que su comienzo esta aquí, y es ahora.
-Sé consciente que habras de ir de abajo a arriba, subiendo una escalera de siete peldaños, y que sólo habras ascendido un peldaño cuando hayas tomado conciencia divina de cada peldaño. Pero no veas cada escalón con esos ojos abiertos que abre de par en par tu ignorancia, abre mejor tu intuicíon a través del ojo del alma, y para que despierte tal visión, manda tu mente al exilio de todo pensamiento, y en el desierto de la nada, empieza a profundizar con el ojo del alma. Mira hacia dentro y no mires nada, porque nada veras hasta que no veas nada. Y cuando la luz del alma se ilumine, y veas luz en tu interior, el sendero se ha iluminado y hacia dentro has de caminar; de abajo arriba has de purgar, y una vez limpia tu energía, dejate llevar.
-Dios esta dentro de ti, es la parte bajo la cual percibes la Verdad, y con esa Verdad y en Ella, moraras por siempre si siempre allí quieres morar. Ve allí pues, y cuando llegues, entenderas; mientras, antes, eres presa de todo lo que acontece bajo el mundo sensorial.
-Ciega, pues, tus sentidos, y lleva el ojo a su morada, para que al recuperar su vista, la sabiduria del alma haga uso de lo que ve, y así, la intuición, te guie de regreso a tu casa;la Gran casa.
-Que el viaje, sea el que elijas, sea siempre de tu gusto; pero no olvides, que el viaje y la compañía la elijes tu; y que al final de cada viaje, un nuevo destino te espera, hasta que de tanto viajar y viajar, el despertar de la vida eterna te invite a un último viaje: Tú.
-No importa lo que tardes, porque el tiempo sólo se mide aquí; para todo lo demás, el tiempo no existe, sólo existes tú.
-Dado que la Verdad te espera eternamente, eternamente es tuya. Cógela, pues te pertenece, y una vez que la tengas, sabras que siempre fue tuya.
-Todo lo que no importa, ansia su fuente en el futuro y goza del recuerdo en el pasado. Todo lo que es Ahora, es lo que importa y lo importante.
-Cuando de vivir en lo que no eres, encuentres refugio en lo que eres, el presente se adueñará de ti, y tú del eterno presente.
-Para Ser, sólo hay que creer; para creer, sólo hay que tener fe; para tener fe, hace falta redimirse y nacer de nuevo, y para esto, hay que saber qué se quiere SER, y qué se ES.
-En las Lagunas del pensamiento esta la flora del alma, aquel vacio que sin forma recuerda el origen de Todo; si lo ves, ya lo has visto Todo; pero no olvides su camino, y regresa junto a Él en cuanto puedas.
-No hay más dialogo que el interno, lo demás son palabras, que sin voz, ocupan un espacio que de vacio llenan el alma. Habla contigo mismo, y al escuchar tu propia voz, mirate, y cuando te veas, digno seras de saber, que lo que has visto, supera todo lo que creías que eras.
-Así pues, centra tu mirada en ti bajo el eterno silencio, y en ella descubre quien Eres. Sólo eso calmará la sed de tu alma. El mana que ella ansia sólo tú se lo puedes dar en la experiencia de esta vida.
-Corre como corren los que creen correr, pero anda tan despacio como los que no pueden andar, para que tal confusión convulsione tu ser, y así, una vez vista la verdad de las cosas, nunca más corras ni dejes de correr.
-Entiende lo entendible y socorre así tus ansias de saber, pero ignora todo conocimiento proviniente de tu sabiduria, pues sólo la experiencia de lo que eres te dará el saber; así pues, sé prevenido en las formas de aprender, y diferencia bien la lógica del sentir, la matemática del amor, para que una vez comprendido cómo has de aprender, sepas que todo aprendizaje viene de ti, y que empieza y termina en ti. 

-Sé justo contigo, pero aún más con esa parte de ti que ves en los demás. Perdónate de toda infracción, pero perdona aún más toda aquella que en ti ves en los demás. Respetate en la medida de lo que Eres, pero respeta aún más lo que son los demás en ti. Amate por encima de todo, pero aún más, ama y deja que se amen los demás. Y..., SE, se todo aquello que has venido a ser, pero aún más, contribuye a que los demás sean esa parte de ti que te hara progresar.
Y tú te preguntaras: ¿qué es Ser?, y yo te contesto: es aquello por lo cual lo intangible ha tomado forma tangible; es aquello por lo que has decidido sentir y tener sentimientos; es aquel vacio que llenas de contenido efimero cuando percibes que estas vacio; es aquello con lo que tu alma sueña cuando duermes; es aquello con lo que dices amar; es aquello con lo que tu voluntad se hace fuerte; es aquello con lo que tu sabiduria reconoce su saber; es aquello con lo que la vida cobra su sentido; es aquello con lo que tú..., de nuevo eres. Así pues, no olvides, entre tanto entretenimiento, quién eres, y que para ser de nuevo lo que eres, has de vivir la experiencia de ser: de vivir todo aquello que eres, y por lo que has venido a ser.
-No te dejes engañar entonces por la experiencia tactil y grosera que abarca todo lo perceptible a los ojos del hombre; no te dejes seducir por los placeres corruptos que perturban tu buen gusto; no te dejes llevar por las tentaciones que dices escuchar; no te dejes embaucar por las maravillas que crees oler en los perfumes de los demás; sé tú, y para ello, yo te emplazo en este viaje: tu vida, a que ahora y siempre seas, y tengas en todo momento la percepción de que eres.
SE".

Rafael Santamaría
629 309 929