lunes, 26 de julio de 2010

LA LUZ DEL MUNDO; original de Rafael Santamaría

Así como el humilde sabe de humildad, así la humildad sabe del humilde.
A vosotros:

"Yo Soy la Luz que da luz al mundo; porque Yo Soy el Mundo donde esa luz, es Luz del Mundo. Y de ese Mundo, no sólo vengo Yo, sino cada uno de vosotros y vuestro particular mundo.
Nada existe en la individualidad del yo, salvo el ego y su forma. Del Todo venimos en forma de uno, de ese uno que no tiene ni concepto ni forma, pero que toma forma para poder realizarse a través del uno. Y bajo ese grado evolutivo desembarcamos en éste mundo; pero habéis de saber que éste mundo en que desembarcáis, no es vuestro verdadero Mundo. Y de éste, vuestro verdadero Mundo, Yo sé lo que vosotros ya sabéis, sólo que aquellos de vosotros que fingen no saber, es porque ni se reconocen, ni quieren reconocerse en éste mi Mundo; vuestro Mundo.
Acallar las voces que dicen ser la verdad y os colman de mentiras; de esas mentiras que os invitan a vivir con miedo. Pues en verdad, en verdad os digo, que reconoceréis en vosotros la Verdad, cuando no tengáis miedo.
Manteneros vivos en este mundo de muertos, para que cuando la verdadera vida venga a por vosotros, vosotros la reconozcais como vida, y no como muerte como hacen otros.
Y acordaros del testimonio que en vosotros es el Padre; que sin otro fin que el amor que sois, busca Ser junto a vosotros lo que vosotros seréis junto a EL el día que os reconozcáis en EL. Y he aquí entre vosotros el hijo que se reconoció en el Padre como hijo; y he aquí un Padre que reconoció como hijo a aquel que le llamo Padre. Pues en verdad, en verdad os digo, que el Padre siempre os estará esperando con los brazos abiertos; pues cada uno de vosotros sois hijos suyos; y EL os estará esperando hasta el fin de los tiempos; hasta que vuestro grado evolutivo os invite de corazón a llamarle por su propio nombre: PADRE.
Todo lo que el hombre ha de hacer es servir a Dios para así dar testimonio de que Dios existe; pues entended que las obras que hagáis en su nombre, las hacéis también en vuestro propio nombre; y éstas, os encumbrarán a cotas tan altas de luz, que seréis seres de Luz.
Yo Soy la Luz de la conciencia; pues el amor que Yo Soy, se torna conciencia; se torna Luz en presencia de Amor.
En virtud de lo que Soy así me manifiesto; así como me manifiesto, doy fe de mi virtud; y he aquí que no tengo más virtud, que Ser lo que Soy: AMOR.
El Amor que cada uno ES, es la conciencia con que el hombre entenderá a Dios, cuando comprenda que a Dios, sólo se le puede entender desde la conciencia del amor. Mientras, todo lo que se acerque al conocimiento de Dios, será ego envuelto de más ego; pues no es AMOR, y sin Amor, no se puede entender a Dios.
Y con esto yo os digo, que la luz del mundo es Amor; y que sólo cuando ese amor ilumine al mundo, el mundo será amor"

Rafael Santamaría
629 309 929