miércoles, 14 de julio de 2010

LA FLOR EN EL JARDIN; original de Rafael Santamaría

Allí donde vayas, allí estará. No le busques con la mirada o no lo verás. Búscale mejor con el corazón, como hace el buen buscador; y entonces, le verás.
A vosotros:

"Así como el tallo enraizado en la tierra crece como planta, así ha de crecer el hombre que nació de sus ancestros; mas yo os digo que sólo la hoja que brota como flor en la familia de las plantas, es la que conseguirá dar sentido al propósito de su existencia.
Pues en verdad, en verdad os digo, que os llegara el día en que habréis de florecer como hombres, y ese día, esta próximo en vuestros días. Y de nada os servirá cuan frondoso y robusto haya sido o sea vuestro tallo, pues en el reino de los cielos, no se entra por la palabra que adorna a la palabra, sino por el sentido de la palabra que tomó forma en La Palabra.
Averiguar pues, la flor de la que estáis hechos, para que cuando llegue el turno de vuestra floración, no seáis tallo sino flor.
Pues el jardinero celestial que es Dios, cuida de su jardín que sois vosotros, pero de la misma manera vosotros, habéis de cuidar del jardín donde Dios es la única flor que habita en vosotros. Y si aún no siendo época de poda, hay que segar las malas hierbas que hacen peligrar vuestro desarrollo espiritual; es preferible perder la cosecha que esperabais, que consolarse con la mentira de que tuvistéis buena siega. 
Y sabed que el agua y el sol con los que se alimenta la flor que el Padre es en vosotros, no es mas que la luz del que toma conciencia del verdadero amor.
Cuando comprendáis que jardinero y jardín son una misma cosa, entonces sabréis que vuestra flor ya despunto como flor; mientras, es necesario que sigáis regando vuestro jardín" 

Rafael Santamaría
senseirsan@gmail.com
629 309 929