jueves, 30 de junio de 2016

EL RINCÓN DEL PERDÓN; original de Rafael Santamaría

En cierta ocasión fui a buscar a mi hijo al colegio.
Como no le encontraba empecé a buscarle por las aulas. Al final le encontré en una clase que no era la suya. Estaba en un rincón.
- ¿Qué haces ahí? - le pregunté a mi hijo. Pero la que me respondería sería la profesora que le vigilaba.
- Está en el rincón de pensar, ha hecho una cosa mal y necesita reflexionar.
- Ah, muy bien ¿Y dónde está el rincón del perdón?
- ¡Cómo! - exclamaría
- Si, necesita un rincón del perdón, si no aprende a perdonarse no aprenderá jamás; créame.
Un año más tarde tuve la ocasión de visitar de nuevo el interior del colegio. Nunca encontré el rincón del perdón.
Así es muy difícil aprender, me dije.
Rafael SantamariaEL

NO TE PREOCUPES, FLUYE; original de Rafael Santamaría

No debes tener miedo, el miedo solo paraliza la fe que Dios quiere que tengas en Él. Sin esa fe el hombre se agobia por su futuro al vivir la vida desde la perspectiva mental que le invita a planificar las cosas como si las cosas tuvieran un futuro predecible y controlable por él.
Soy un pensamiento en la mente de Dios.
Entonces..., si siempre estoy en sus pensamientos, ¿por qué y de qué me preocupo? - pensé en cierta ocasión - pues es Él el que ya se preocupa por mi al tenerme siempre en sus pensamientos - deduje.
Entonces me di cuenta que las preocupaciones distorsionan la comunicación innata que a través de la intuición existe entre la Conciencia Cósmica (o Dios) y nuestra conciencia.
Debo limpiar mi mente de todo vestigio inerte de pensamiento con que mi ego quiere desconectarme de mi verdadera conciencia - me dije a mí mismo.
Entonces rece y rece como me enseñaron a rezar cuando era pequeño, y tras mis oraciones me llegó la imagen de un libro que ya había visto en algún sitio pero que no recordaba dónde:" Autobiográfica de un Yogui", de Paramahansa Yogananda.
En verdad, el camino es corto para la mente que no se preocupa de hacerlo largo.
Medita
Rafael Santamaria