miércoles, 4 de noviembre de 2020

LA RUTINA; original de Rafael Santamaría

 Un mismo movimiento de un músculo, repetido una y otra vez, se convierte en RUTINA para el músculo, NO en AVANCE.


Para que un músculo avance en su entranamiento tiene que CAMBIAR de movimiento, o de resistencia.

Toda rutina lleva al desgaste y a la DESAPARICIÓN de todo aquello que se realiza mediante una acción MECÁNICA.

Ésto pasa con TODAS las cosas.

Lo mismo sucede con los PENSAMIENTOS.

Pensar siempre de la misma manera lo único que hace es desarrollar unas IDEAS FIJAS,, a las que acabaremos llamando CREENCIAS, las cuales no nos permitirán avanzar al LIMITARNOS a pensar siempre de la misma manera.

Un pensamiento NUEVO requiere de una acción nueva y diferente de pensar a la que estamos acostumbrados.

La COSTUMBRE es a la vez la panacea y la justificación de toda rutina.

Sólo de la CONCIENCIA pueden emanar ideas nuevas.

Jesucristo hacia nuevas todas las cosas porque siempre tenía pensamientos nuevos al vivir en todo momento desde su conciencia.

El MOMENTO es el tiempo y el lugar donde toda conciencia encuentra la manera de poder EMERGER a través del corazón.

No existe un ejercicio de mantenimiento ni para el músculo, ni para la mente.

Eso es rutina. Eso es MENTIRA. Es la falsedad del ego que impone el modo costumbre, su modo, para ejercer su TIRANÍA.

La gente que va al gimnasio y dice que va a mantenerse, utiliza esta frase para JUSTIFICAR no tener que ESFORZARSE todo lo que pudiera.

Pero si no das todo lo que puedes, entonces, ¿qué ESPERAS a cambio?

De la misma manera, si no desarrollas tu mente con nuevas formas de pensar, ¿cómo esperas entonces que tu vida CAMBIE?

Todo cambio requiere de MOVIMIENTO, y toda rutina lo que hace es ANULAR cualquier TENTATIVA de cambio. 

Si observas que estás VIVIENDO la misma vida de SIEMPRE, entiende alma hermana, que entonces estás viviendo en MODO RUTINA.

Sal de ese MODO. 
Cambia, no te ACOSTUMBRES nunca a nada, y no sólo tu vida cambiará, sino que avanzarás en tu vida.

Rafael Santamaría