sábado, 29 de mayo de 2010

EL CICLO DE LA VIDA; original de Rafael Santamaría

Entended, que el amor hay que cuidarlo, que el amor hay que mimarlo, que el amor hay que vivirlo; pues si así lo hacéis, os estaréis amando. Porque yo os digo que sois amor, y que sólo viviréis en vosotros, si os entregáis a lo que sois.
A vosotros:  

"Hubo una vez un hombre que arruinado en su moral, busco asilo en la tristeza de la vida; pues desolado por el fruto emocional que le había dado la siembra de su razocinio, no encontró motivo para seguir labrando el porvenir de su vida. Y en aquellos infatigables momentos de duelo, la sombra de su destino quiso mostrarle que la fórmula de la verdadera vida, no tiene mas ingredientes que la actitud con que cada experiencia es vivida para extraer de ella el jugo del aprendizaje; pues dicho jugo, es la parte del brebaje con que todo sabio fabrica la pócima de su iluminación.
Así pues, en un día cualquiera, al alcanzar la noche, en un sueño sin aparente sentido, y desde un lugar, hasta entonces desconocido, se vio como era, y en esa visión, no se vio sólo; y con aquella compañía, sintió sentirse acompañado y querido; y no queriendo despertar, deambuló en su sueño buscando una realidad a aquel sueño; y aunque al principio no encontró mas que espejos y mas espejos que reflejaban la realidad de la vida que había llevado, encontró también una ventana, y al asomarse por ella, vio otro mundo, un mundo nuevo, el cual conocía sin saber su procedencia.
Y en ese nuevo mundo, vio como cada cual peregrinaba solo en la búsqueda que todo peregrino de la vida, ha de hacer, si quiere saldar las deudas con su verdadero destino.
Y uniéndose al camino de aquellos peregrinos, busco su propio camino; y como compañero de viaje, echó mano de su aprendizaje; y como báculo para aquel camino, tomo la vara de amor que sostiene y da firmeza al corazón; y como garantía a su propósito, tomo prestada de su alma, la fe en Dios.
Y de regreso a la vida, una vez finalizado su sueño, tomo conciencia de que aquel sueño, no había sido un sueño, sino que el sueño era la vida en la que se había dormido, y que despertar a la vida, era poner toda su fe en aquel sueño.
Y por de pronto, cambio su actitud; y al cambiar su actitud, cambio su vida; y al cambiar su vida, se sintió vivo; y al despertar a la vida, volvió a creer en él; y una vez recuperada la fe en si mismo, vio la luz; y al ver la luz, sintió como esa luz era parte de él; y al sentirse luz, se volvió luz; y al volverse luz, su luz iluminó el camino que otros no veían como camino.
Y así, y no de otra forma, el ciclo de la vida se repite una y otra vez para que unos ayuden a otros, y estos otros, llegado el momento, ayuden a los que vengan detrás.
Y cuando el úlitmo de los últimos llegué al mismo destino que llegaron los primeros en llegar, el ciclo de ésta vida se habrá acabado, y entonces, de nuevo otro ciclo, otra vida, empezará "

Rafael Santamaría
senseirsan@gmail.com
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