domingo, 22 de agosto de 2010

DAD GRACIAS, original de Rafael Santamaría

Aprended a interpretar vuestra propia lectura; y vuestro libro, aquello que sois, será vuestro mejor maestro.
A vosotros:


" Y cuando os sintáis perdidos, daros cuenta de la oportunidad que se os brinda; pues sólo él que se encuentra perdido, tiene la grandísima oportunidad de encontrarse.
Y cuando os sintáis solos y desamparados, daros cuenta de la oportunidad que os brinda vuestra soledad: la de conoceros a vosotros mismos. Pues en verdad, en verdad os digo, que no conoceréis nunca a nadie más interesante que vosotros mismos; y que cuando os conozcáis, ya nada de lo anteriormente conocido tendrá sentido. 
Y cuando os sintáis abatidos y desganados, dad gracias por vuestro abatimiento, pues gracias a él podréis tomar conciencia de la felicidad que os aguarda cuando decidáis poner fin a vuestra agonía.
Y cuando la duda asalte los dominios de vuestras creencias, dad gracias a Dios; pues vuestra alma se regocija en vosotros cada vez que no os identificáis con aquello que os han enseñado, y sí, con aquello que sois y sentís que sois.
Y cuando creáis que el amor os falta y se os llenen de vacio vuestras ilusiones, dad gracias al Padre que os creó, porque os llegó la oportunidad de aprender a amar y dejar atrás los tapujos con que vuestro ego dice amar.
Pues en verdad, en verdad os digo, que si supiérais sentir el amor, os sentiríais amados siempre y en todo momento; sin embargo, lo que hacéis, no es más que pensar y pensar; y nada de lo que podáis pensar con vuestra mente acerca del amor, es amor. Pues el amor está más allá de cualquier etiqueta mental. El verdadero amor es tan indescriptible, que las palabras del poeta sólo se acercan a la fragancia que despide su aroma; su esencia, es sólo palpable por aquellos que viven la verdad de su alma. Todo lo demás, todo aquello que se habla del amor, es la burla con que el ego se mofa de la ignorancia del hombre que se identifica con su ego.
Y cuando os sintáis lejos de todo aquello que añoráis, dad gracias, dad gracias al sentimiento que os gobierna, pues gracias a él podréis aprender que la lejanía de lo que añoráis está tan próxima, que nada está lejos ni cerca; pues lo que añoráis sois vosotros mismos en la forma exterior en la que habeis elegido identificaros en ese momento.
Y cuando la tristeza siembre en vosotros la desemperanza; dad gracias, dad gracias a Dios; pues habéis de saber que la cosecha que habréis de recoger a tal siembra, no es la de la melancolia, sino aquella que os invita a descubrir que la tristeza es tan sólo un estado más de felicidad que se viste de negro.
Pues en verdad, en verdad os digo, que vuestro aprendizaje es el aval a vuestra sabiduría; y que sólo aquellos que sepan ver de cada situación la oportunidad que se les brinda para aprender más de ellos mismos, serán llamados a las puertas del cielo. Los demás, viviran su propio infierno; un lugar sombrío creado por su ignorancia.
La esperanza de ver a Dios, cobra forma cuando uno deja de identificarse con las formas; la esperanza de ver a Dios, cobra sentido cuando uno de identificarse con lo externo.
Dios nunca vendrá a verte a menos que te des cuenta de que Dios está en tí. Veelo con tus propios ojos, y verás que es cierto; tan cierto como que Dios nunca se ha alejado de tí tanto como tú de El.
Con el amor del que hago gala al escribiros yo os digo: no dejéis de sentir vuestra mente, pues llegará el día en que la mente os devuelva la libertad de SER vosotros mismos, y ese día, está proximo en vuestros días "

Rafael Santamaría
629 309 929